miércoles, 25 de agosto de 2010

GUILIN… IS NOT MY FAVOURITE CITY

Primer día en Guilin y ya hemos tenido suficiente. Estamos en un albergue en el centro de la ciudad que está super bien de precio (10 euros la doble con baño y aire acondicionado!!) pero la ciudad es muy turística; no como Lloret, pero como Tossa sí, mucho chiringuito de baratijas, mucho español e italiano en viaje organizado y los precios altos. Además, llegamos ayer por la noche y está todo cubierto de luces de neón; creo que hasta las papeleras están forradas de neón. Hemos subido a la colina Fu, donde se supone que hay unas cuevas con budas excavados en piedra, y lo que hay son chiringos dentro de las cuevas, que usan algunos budas para colgar las baratijas. Todo esto después de clavarnos 6 euros por entrar!! Las vistas desde arriba es lo único que merece la pena, aunque no se aprecian bien los picos kársticos porque está la ciudad en medio. Mañana cogeremos una barca por el río hasta llegar a Yangtsuo a ver si vemos bien el paisaje, que es el objetivo de visitar esta ciudad (aunque creo que después de haber visto Halong Bay en Vietnam…)Bueno, no adelantemos acontecimientos, esperaremos a mañana. No hemos encontrado tren para Guanzhou así que nos toca ir en bus litera otra vez. Es el último trayecto largo que tenemos que hacer porque…ESTO SE ACABA…OH MY GOD!! Ya se que no debería decirlo pero…¡si no me he enterado y ya se han pasado las vacaciones!
Sólo nos quedan tres destinos más: Guanzhou, Macao y Hong-kong.

HANGZHOU EN BICICLETA

Los dos días que hemos estado en Hangzhou hemos ido en bici. El albergue estaba a 5 o 6 km de la estación de tren, y nos ha ido muy bien para recorrer todo el lago, que es la parte más importante de la ciudad. Se construyó en el siglo VIII y está formado por varias islas, puentes, pagodas, jardines…Nos ha gustado el cambio el asfalto asfixiante de Shanghai por los sauces llorones. Lo único malo es que es el destino más visitado por los propios chinos, así que toneladas de gente por todas partes. Hemos visitado la Pagoda de Leifeng, que es una construcción moderna, pero tiene unas vistas de la ciudad impresionantes y encontramos un sitio para comer donde la ternera con especias estaba de muerte. Eso sí, todo lo escogemos por foto o intuición, porque ya se nos está acabando el Money y los sitios con menú en inglés son un poco más caros…ayer por la noche pedimos un plato de cerdo, pero en realidad eran los intestinos. Es como comer sepia, pero muuuuuy picante.
Por cierto, no teníamos dinero para dejar el depósito de las bicis en el albergue, así que se quedaron los pasaportes, porque las necesitábamos para poder ir al banco a por dinero y a comprar los billetes de tren. Después de 6 km para encontrar el banco, recordamos que no te cambian dinero si no tienes pasaporte, y nos entró un sudor fríiiiio sólo de pensar que tendríamos que volver. Intenté colar el DNI pero no servía; pude cara de desesperación, de pena, los ojos llorosos mientras se lo explicaba al de la ventanilla, nada, el pobre chico lo único que podía hacer era cambiarnos el dinero con el DNI de un amigo chino, así que fui a la cola de gente que esperaba y pregunté si alguien hablaba inglés. Entonces se hizo la luz en forma de señora, que vino conmigo a la ventanilla y dio sus datos y la identificación y pudimos cambiar lo que nos quedaba. Por cierto, en China, todas las personas tienen un límite de 5000 dólares para cambiar moneda extranjera. Después fuimos a comprar los billetes de tren para Guilin, porque Fenghuan no tiene estación de tren, y perdíamos dos días para llegar haciendo combinaciones con autobuses…etc. En Guilin también dicen que el paisaje es precioso, y tardamos un día en el tren; además ya estaremos a unas 14 horas de Guangzhou que es nuestro próximo destino. Vamos en litera así que aprovecharemos para dormir y estar tirados sin hacer nada .

SHANGHAI IS SOOOOO HOT!

Al llegar a Shanghai lo primero que recibimos fue una sensación térmica de 43 grados y te sudan partes del cuerpo de las que nunca te habías percatado. A parte de esto y de que había 8 millones de chinos turistas ocupando todos los hoteles, el centro de la ciudad me ha gustado. El Bund, que es la parte que da al río está llena de oficinas y centros comerciales y al cruzar está Pudong, el distrito financiero, lleno de rascacielos y donde está la torre más alta de China (creo que es la 2ª en el mundo) con 492 metros. Ir en el ascensor hasta el último piso te deja los oídos peor que en el avión. Cuando llegas arriba al observatorio, el suelo es de cristal y la verdad es que al principio acojona un poco, pero las vistas son increíbles. Para mí, ha sido lo mejor de Shanghai. Subimos al atardecer para ver la ciudad por la noche (más que nada porque durante el día, con la niebla de la contaminación no ves más allá de 5 metros). También recorrimos la parte antigua y la parte francesa, y fuimos al museo. Todo esto sin parar de sudar y haciendo colas interminables para cualquier cosa: para pasar el control de seguridad del metro, para comprar el billete, para entrar en el vagón, para la escalera de salida, para entrar en el museo…etc. A veces ya no tenías esma ni para colarte. Hoy, 17 de agosto nos hemos ido en tren (como no) a Hangzhou, en vez de quedarnos un día más. Edu se ha quedado porque ayer fue a la Expo y hoy le faltaba ir al observatorio, así que supongo que nos volveremos a ver en Hong-kong . Ahora está cayendo un tormentón por eso estamos en el albergue, a ver si para un poco que no hemos podido ver nada de la ciudad todavía, y mañana intentaremos conseguir billetes de tren para ir al centro-sur de China, a Fenghuang, que según dicen por aquí es el paisaje que inspiró a Cameron para crear el de Avatar. Ojalá me encuentre uno de esos dragones con conexión USB y me ahorro las colas en la ventanilla del tren ;-).

LUOYANG?...NADA, SI ESTÁ A 4 HORAS EN BUS…

Pero nosotros tardamos 10 horas porque hubo un accidente en la autopista y hasta que no vino la grúa a sacar el camión no se pudo continuar así que perdimos todo el día. Lo positivo fue que conocimos a Edu, otro viajero de Burgos que hacía la misma ruta que nosotros. En Luoyang no hay nada que ver, excepto el mercado nocturno, donde puedes ir a cenar, y venden de todo; desde las típicas brochetas, hasta gusanos, lombrices y grillos. El objetivo de llegar hasta aquí es una montaña que está cubierta de cuevas excavadas en la piedra, con cientos de estatuas representando a Buda. La verdad es que nos gustó mucho, aunque acabamos muertos de subir y bajar a las cuevas porque además había mucha humedad y a las 5 de la tarde teníamos que coger otro autobús para Shanghai. No pudimos conseguir literas en el tren porque estaba todo reservado, y lo único que quedaba eran algunas plazas en el vagón de los que van de pie (a Shanghai hay 14 horas de tren!!). Al final conseguimos los billetes de bus, y yo ya me veía toda la noche en el asiento dando cabezadas pero sin poder dormir, y llegando a Shanghai a las 7 de la mañana hechos polvo…pero no!!! Los autobuses tienen literas; es el mejor viaje en bus de mi vida. Los chicos no iban tan cómodos porque las literas hacen 1’60 más o menos…¡ah, veis cómo es mucho mejor ser de estatura normal!!! Eso sí, como siempre, los chinos son muy amigos de comprar cualquier cosa más barata y no en ventanilla, con lo cual, había 10 personas que tenían billetes escritos a mano con números de litera puestos al azar. Tuvieron que ir en el mínimo espacio de suelo que había todo el viaje. Un chico me pedía la litera porque lo tenía escrito en un papel, le puse una cara al pobre que ni barrera idiomática ni nada, me entendió perfectamente. Y es que después de 10 horas de bus+dos horas andando hasta el mercado nocturno+levántate pronto para ver cómo salimos de Luoyang+ 4 horas sube-baja cuevas por la montaña a 35 grados…yo, por mi litera, MA-TO.

XIAN

Hemos viajado 6 horas por carretera y el bus nos ha dejado en una estación que no es la habitual (vaya a tomar por c…). No teníamos ni idea de en qué zona estábamos y unos hombres ofrecían su coche a cambio de tres euros. Al final me he metido como en una especie de academia de informática y ala, todos revolucionados porque han aparecido dos guiris de la nada. La verdad es que la gente es muy, muy simpática, amable, comunicativa…se me acaban los adjetivos. Tenía el nombre de la calle de nuestro hostal en chino (viene en la guía) y en seguida nos han acompañado a la parada de bus. ¡Resulta que estábamos a 6 km de la muralla!. Dentro del bus le he mostrado la dirección al hombre que estaba sentado detrás de mí y también ha ido a hablar con el conductor para que nos avisara de la parada exacta. La verdad es que viajar así es muy fácil, no tiene mérito; el otro día en Pekín, el Jordi se olvidó las gafas de sol en el local donde comimos, y la dueña-cocinera-camarera, se recorrió media calle adoquinada con los tacones y el delantal hasta que nos alcanzó…ay omá, como en casa, que ya me han robado el bañador dos veces en la piscina…
Por cierto, hace 1 semana que no vemos el sol pero por la contaminación que ahí aquí. Es demasiado bestia, el sol se ve como una bola naranja, pero no llega ni a haber resol ni nada, da un poco de miedito, parece el apocalipsis . Por eso en Xian hace un calor tan asfixiante. Estás todo el día sudando y cuesta subir las escaleras. Me gustaría saber cuál es la humedad relativa aquí, supongo que debe triplicar la de Barcelona.
La ciudad no es gran cosa. El centro está bien, con un la Torre de la Campana como eje articular, y lo mejor es el barrio musulmán. Es un hervidero de sitios para comer, beber y comprar baratijas. La mezquita es muy curiosa, porque es construcción china y el minarete es una pagoda pero por dentro es como cualquier mezquita, me ha gustado mucho el contraste. La muralla también impresiona, 12 metros de altura y 14 km de perímetro y está perfectamente conservada.
Esta mañana hemos ido a ver los guerreros de terracota (también nos ha caído encima un tormentón a media visita, y tardas 2 horas entre ir y volver porque está en las afueras) pero junto con la muralla creo que es lo que más nos ha impresionado hasta el momento. Parece increíble que 2.300 años atrás, hiciesen un ejército entero a tamaño real, lo enterrasen junto con el emperador, y se conserve hasta hoy. Y que se pueda ver, por supuesto. Si alguien vio la muestra que trajeron en el Fórum de Barcelona, no tiene nada que ver, aquí, por ejemplo, en una de las zonas excavadas hay 6.000 guerreros en formación, con caballos incluidos y todos tienen la cara diferente.
Bueno, mañana queremos salir temprano hacia Luoyang para ver la cueva de los diez mil budas. No sabemos si hay bus, si hay que reservar o no…a ver si tenemos suerte y encontramos transporte!

PINGYAO

Después de 12 horas de tren, hemos llegado a Pingyao, la ciudad amurallada mejor conservada de China. En el tren chino, es vez de haber compartimentos y literas de 2, el vagón es común y las literas son de tres. La verdad es que es muy cómodo y hemos llegado a las 7:30 de la mañana, descansados y dispuestos a recorrer toda la ciudad en bici pero el día no ha acompañado. No ha parado de llover hasta la tarde, así que hemos decidido hacerlo caminando (no hay asfalto, sólo adoquines en la calle principal). La ciudad original que está dentro de las murallas conserva la arquitectura intacta, con lo que parece que estés viviendo en plena dinastía Ming. En cada esquina hay un templo o un porche que llama la atención. Lo mejor, desde nuestro punto de vista es pasear por la muralla, subir a la torre y visitar la casa de Lei Lutai, típica de la época y, por supuesto, la comida local. Nos vamos a poner como cerdos de tanto comer, pero es que hacen unos platos…nuestro preferido de esta zona es un plato de pasta parecida a la de los canelones, fría y que viene con dos salsas, la de tomate que no pica y la de vinagre que es picante. Sólo nos quedamos un día y, al siguiente, cogeremos el bus hasta Xian. Es más rápido pero sale por la mañana, así que hasta las 3 no llegaremos. En tren es imposible ir porque está todo reservado.

I LOVE BEIJING

En China hay conexión a internet con y sin cable casi en cualquier lugar pero el gobierno lo tiene todo censurado, así que solamente podemos usar el Hotmail. Ni facebook ni blog ni nada. Voy escribiendo igualmente para que no se nos olvide nada, y ya lo subiré cuando pueda.
Hoy, 9 de agosto, hemos acabado nuestra etapa de 4 días en Pekín. We love it!!! Es increíble, no esperaba mucho de la ciudad, pensaba que sería una gran urbe gris de 15 millones de personas y que sirve de plataforma para visitar los monumentos y la gran muralla. Estaba totalmente equivocada. El hostal lo teníamos justo 2 calles al sur de la plaza de Tiannamen, en el centro de un hutong, que es el típico barrio de arquitectura china antigua y el grupo de hutongs del centro de Pekín forman un pueblo aparte donde realmente vives la cultura tradicional china. Mención especial para la tradición de…maricón el último; es decir que se cuela todo dios delante de ti. Nos encanta, somos unos maestros. El sábado nos ahorramos 2 horas de cola para comprar las entradas de la ciudad. Eso sí, si otro extranjero te ve, pone cara de Oh my god!! Pero en realidad están verdes de envidia, juás!
La comida, por supuesto no tiene nada que ver con la de los restaurantes de Barcelona, es muuuuucho mejor, no puedes parar de comer, quieres probarlo todo (tofu, caracoles, brochetas, dumplings, bambú…); suerte que las cervezas son de 550 ml., así es más fácil hacer la digestión.
Hemos visitado La Ciudad Prohibida, La Gran Muralla, Las Tumbas de la dinastía Ming, El Palacio del Cielo, La Plaza de Tiannanmen y el mausoleo donde exponen a Mao. Lo que más nos ha impresionado es la gran muralla, y también la ciudad prohibida. Lástima que hemos cogido el fin de semana y hemos visitado la ciudad junto con diez millones de chinos por lo menos (no exagero, mirad las fotos). Por cierto en la ciudad prohibida, a parte de los diez millones de chinos estaba el staff técnico del Barça. ¿Qué probabilidades hay de coincidir con Guardiola justo en la Puerta de la Armonía Suprema?... pues ya no hago más Bonolotos .

VEINTE DIAS DE CENSURA

Bueno, después de veinte días de un viaje maravilloso por China, puedo volver a usar internet. Hoy hemos llegado a Macau y aquí hay acceso libre, no hay censura como en China, así que aquí va el resumen de unos cuantos días. Mañana subo fotos.

miércoles, 4 de agosto de 2010